EL GIGANTE DE HIERRO
Resumen
The Iron Giant, de Brad Bill (1999) |
El Gigante de Hierro (The Iron Giant, 1999) es una película de animación que trata la historia de un autómata gigantesco, el cual ha caído misteriosamente a la Tierra desde la atmósfera.
La película comienza con el robot como un objeto extraño el cual cae sobre el océano próximo a Estados Unidos. Como la película se sitúa en plena Guerra Fría, donde la carrera espacial está en pleno apogeo con el lanzamiento del Sputnik I, los pocos que han visto al gran robot piensan que es un arma de destrucción diseñada por los soviéticos. Además, los daños que va causando el robot a medida que cruza los campos y bosques, dan fuerza a este pensamiento. Es entonces cuando Hogarth Hughes, un niño de nueve años que había escuchado la historia de este gigantesco hombre de hierro en el restaurante de su madre, se lanza al bosque a averiguar que es lo que se ha comido su antena de televisión.
Allí conoce al robot, al cual salva de electrocutarse al tratar de comerse una subestación eléctrica. Pero es al día siguiente, al intentar Hogarth fotografiar al gigante, cuando se hacen amigos y Hogarth trata de ayudarle. Le lleva hasta su cobertizo, pero en el camino, un incidente con un tren hace descubrir a Hogarth que además tiene la capacidad de autorrepararse y que cada parte de su cuerpo es independiente en sí misma.
Los numerosos desastres provocados por el robot llaman la atención de los servicios secretos del gobierno, por lo que envían a investigar lo que sucede al agente Kent Mansley, el cual descubre algunas pruebas que sitúan a Hogarth en el lugar de los hechos. Debido a las sospechas de éste, y a que ha alquilado una habitación en la casa de Hogarth para su estancia en el pueblo, el niño se ve obligado a trasladar al gigante a otro lugar. Lo lleva a la chatarrería, donde puede alimentarse sin preocuparse de destruir nada y donde conoce a Dean McCoppin, que no está muy de acuerdo inicialmente pero termina aceptando al robot. Tras descubrir el agente Kent una prueba de la existencia del autómata, el Ejército estadounidense lleva a cabo una operación para buscar y destruir al gigante, lo cual desemboca en una lucha entre el gigante y los militares.
Análisis
Si dejamos a un lado la historia, la concepción del personaje del gigante es bastante curiosa. Se trata de un robot bastante humanizado, al tener características muy ligadas al ser humano, como el poder distinguir el bien del mal, la capacidad de comunicarse o el aprendizaje tan avanzado que muestra. Es capaz de aprender con apenas un par de ejemplos, algo que hoy en día no se puede conseguir en nuestros autómatas.
También es curioso algunas características que le podrían dar características parecidas a un ser vivo, como la capacidad de autorreparación, como podría hacer una planta; y la necesidad de alimentarse con metal, en lugar de la acumulación de energía eléctrica como hacen los robots actuales.
En cualquier caso, lo que más contribuye a poder decir que es inteligente son las capacidades de mostrar sentimientos y tener cierta consciencia de sí mismo. Es interesante puntualizar que la inteligencia en este robot no se encuentra centralizada sino que está formada por una serie de piezas independientes entre sí y que son aptas (dentro de sus capacidades) para realizar todas las particularidades mencionadas. Un ejemplo de ello es la escena en la que la mano del robot, en su viaje para reconectarse al brazo, se cuela en la cocina de la casa de Hogarth y curiosea entre las cacerolas. Cuando Hogarth la ve, corre para llevársela de allí y la mano le pone resistencia a marcharse, lo cual demuestra cierta iniciativa en su inteligencia.
En cuanto a cómo aprende, a lo largo de la película vemos algunas estrategias. La primera que se muestra es el aprendizaje a través de la imitación, donde el gigante imita a Hogarth en aquello que hace. Después muestra la capacidad de aprendizaje por demostración, como cuando Hogarth le enseña algunos conceptos a partir de los ejemplos. Por último, hay algunas situaciones en las que se ve el aprendizaje por ensayo-error, sobre todo en las enseñanzas sobre moral al robot. El robot actúa, y Hogarth le dice que está bien o mal.
Llevando todo esto que hemos mencionado anteriormente a la realidad, pocas cosas serían factibles a día de hoy. Poco a poco se van haciendo avances en la robótica y en los androides, pero todavía se encuentran algo lejos de todas las capacidades que presenta el gigante. En el campo de la inteligencia, actualmente no se han logrado inteligencias tan amplias como la del robot de la película, sino que más bien son capaces de realizar una de las tareas bastante eficazmente. Sin embargo, temas como la moralidad, la autoconsciencia o la capacidad de mostrar sentimientos reales y no simulados están muy lejos de lo que se podría de conseguir en la actualidad.
Pero por un momento, imaginemos que es posible la construcción del autómata de la película. ¿Realmente sería apropiado? En principio, es una inteligencia que está a merced del sujeto que la eduque. En la película, Hogarth es un niño bueno, con unos valores del bien y del mal bien marcados. Pero si, por casualidad, no hubiese sido Hogarth sino otra persona cuyos valores fuesen más malintencionados, entonces podría convertir al robot en un arma extremadamente peligrosa.
Es de la misma forma que se educa a un niño. Se le debe proporcionar una educación moral para poder comportarse de forma normal dentro de la sociedad. Este debate cada vez está más en liza en la actualidad al ir progresando en las inteligencias, con lo que estaría bien tener unas líneas establecidas de cómo educar a una inteligencia artificial, ya que puede ser un peligro para la población al ser más robustas y fuertes que el cuerpo humano.
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